La ciudad collage

Las fotografías que forman parte del libro “la ciudad hecha de encuentros” presentado en una anterior publicación vuelven a cobrar protagonismo, solo que esta vez de una forma diferente. Fue en un viaje de intercambio estudiantil en la ciudad de Porto Alegre, donde todo se documentaba a través de una cámara (o desde una fotógrafa) curiosa, inexperta y totalmente amateur, que nacieron estas imágenes. Sin embargo, las fotografías espontáneas captadas aleatoriamente, por más básicas que fueran, creaban una imagen contextualizada de las personas en su espacio social y reflejaban prácticas sociales que tenían algo en común: gente viviendo el espacio público.

Al ver lo que esas imágenes reflejaban fue que me dispuse a indagar en el proceso de construcción de sentido de las mismas con el fin de aportar a la comprensión del espacio público, entendido como lugar de relación y de identificación, de contacto entre las personas, de vitalidad urbana, y de expresión comunitaria. De esta forma, se plantea a la fotografía no solo como herramienta de estudio para entender la diversidad de la experiencia urbana, sino que se amplia la noción de retrato mas allá del concepto de reproducción. Jorge Jáuregui sostiene que: “La fotografía no se limita a la reproducción  de la realidad, sino que la recicla”. (JÁUREGUI, 2010)

Desde de esta concepción es que propongo el reciclaje de las fotografías que incluyen situaciones cotidianas que suceden en el espacio público de Porto Alegre, para aportar a nuevas interpretaciones en cuanto a las relaciones del cuerpo con la ciudad, del valor de los espacios de uso en contraposición con los espacios invadidos por las fuerzas del mercado, colocando cuestionamientos en los modelos de producción de ciudad y, a su vez, resaltando las cuestiones que ya se señalaron como positivas a lo largo del libro citado.

Como elemento reciclaje me sumerjo en la técnica del collage, en este caso digital, con el objetivo de reconsiderar a la fotografía, y a su vez,  recrear y hacer que cobren vida nuevas situaciones, a las cuales Fernando Fuão llama de “Encuentros”. Estos encuentros que se producen en el collage son, según él,  “...la relación recíproca: envolvente entre figuras, objetos y cuerpos, o del propio ser frente al otro, o mismo de su representación.”(FUÃO, 2014).

Son, entonces, estas relaciones reciprocas entre envolvente-espacio publico- y objetos-cuerpos- las que se abordan en los collages que derivan de practicas que unen y ultrapasan los campos del arte, del urbanismo y de las ciencias sociales en una tentativa de investigar y simultáneamente proponer en las ciudades espacios mas democráticos y, antes que nada, mas sensibles.

Pensar a la ciudad hecha de encuentros es pensar en un collage. Un collage hecho de recortes y fusiones de fotografías, de figuras extraídas de su contexto anterior a la espera de ser liberadas al producirse el encuentro con otras, al modificarse su condición de objetos al ser construida una nueva realidad, una nueva ciudad.

Según Fuão, “El encontrarse caracteriza al estado abierto y receptivo de todas las figuras.” El lugar donde esas figuras-cuerpos-, se encuentran es en un soporte concreto, la hoja que las contiene es el espacio público. “Es el instante en que el movimiento de la producción  se acelera, y las figuras ya recortadas se agitan y danzan totalmente libres y sin compromiso, unas sobre las otras, unas en busca de las otras.” En esta danza libre de los cuerpos en el espacio público, el movimiento actúa como un impulsor, es la cola que une a las figuras a la hoja para que puedan nacer nuevos encuentros. 

Las personas son pianos

La apropiación (necesaria) del espacio.

Desestructura urbana

Que hace a una multitud cambiar el mundo?

 En una trama compleja. 

Corpocidade